07:00. Quedamos para salir pero el dueño, preocupado por nuestro bienestar, nos obliga a tomarnos un cafe antes. Mientras aprovecha para charlar, mas o menos. Su forma de comunicación consiste en hablarle al móvil en japonés, darle al botón mágico, y esperar a que el móvil lo traduzca al español en voz alta de forma cuasi-coherente, cosa que casi nunca sucede :-). Todo ello con una sonrisa (a veces risa directamente). !Que tío más simpatico!
Por desgracia ser simpático no tiene relación ninguna con saber hacer un buen café, así que al salir aprovecho para sacar uno de una de esas máquinas que estan llenas de extraños elixires y que te puedes encontrar por todo Tokio (cada 15 metros aprox.)
09:45. Llegamos al famoso cruce y aprovechamos para desayunar en condiciones. Y luego vamos a un megaedificio de esos que venden tecnología !Que locura! Es como todas las tiendas del pueblo metidas en un bloque, y amenizadas por una música que yo describiría como "La marcha infernal" que se repite cada 5 minutos.
10:50. Salimos a descansar los oidos y dirigirnos hacia nuestra siguiente parada, el templo más grande de Tokio. Nos perdemos. Preguntamos varias veces. Nos dan instrucciones contradictorias. Upss, puede que sea porque preguntamos por un templo a la vez que enseñamos la foto de otro distinto.
12:25. Llegamos. Paz y tranquilidad .... o eso pensaba yo. Mas que un templo parece un mercado. O sea, bonito es, pero esta rodeado de puestos que te venden de tó. Y hay gente pa'aburri.
13:34. Salimos para comer algo. Pedimos unas cervezas y nos las tren. Pedimos la carta y nos la traen ... en perfecto japonés. La pareja de japoneses que tenemos al lado resulta que habla italiano y amablemente se ofrecen a traducirnos el menú :-). El afán de ayuda al turista de esta gente no conoce límites. Gracias a ellos evitamos platos compuestos por entrañas varias (higado e intestinos mayormente).
17:48. Sin mayor problema nos presentamos en Elecric City. El nombre ya promete. Y no defrauda. Edificio de 9 plantas inmeeeeeeeensas llenas con cualquier cacharro que tenga un enchufe que te puedas imaginar. El locurón. Y esta vez sin cutre-música de fondo.
19:31. Tras ver dos plantas y saturado de tanto cachibache electrónico salimos hacia una tienda de cosas raras.
20:40. Decepción. De cosas raras nada. Es como un chino mu grande, sin mas.
21:55. Damos una vuelta por los alrededres buscando un sitio para cenar mientras nos damos cuenta de que sin querer nos hemos metido en el barrio de las guarrillas :-).
23:03. Tras cenar y nada mas nos vamos hacia el hotel, seguro que llegamos enseguida.
23:40. Asumimos que nos hemos vuelto a perder. Preguntamos al amable lugareño de turno que esta vez nos acompaña durante 20 minutos a la parada de metro. Bien!. Cuando llegamos la estación está cerrada. Mal! El amable-amable lugareño se desvive para buscarnos una ruta alternativa. Unos minutos despues de dejarnos vemos aparecer de nuevo al amable-amable-amable lugareño que se ha dado la vuelta para decirnos que la siguiente estación de metro está abierta. Gracias a ello cogemos el metro de las 00:15. A las 00:25 sale el último. Uffff, por los pelos, me veía durmiendo en un árbol.
00:48. Por fin llegamos al hotel. Que día mas largo. Estudiamos la combinación para el día siguiente (!Nos vamos a Hiroshima!) y a dormir. Creo que voy a llegar a España con un gran deficit de sueño.
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